Si eres una mamá a tiempo
completo, te despiertas tarde para ir a la oficina o, simplemente, vives
a mil por hora, es mejor decirle adiós a un maquillaje difícil.
¿La clave? una piel tersa, ojos despiertos y piezas que hagan el trabajo
rápido. Bien sea que optes por un look natural o por darle atención a
un rasgo especifico, sigue estos consejos y aprende a maquillarte en
pocos minutos.
Prepara tu piel. Lo más importante en cualquier look es la
humectación –cuando el rostro está hidratado, el maquillaje se desliza
más fácil y obtienes un lienzo perfecto. Realiza una rutina cada mañana y
noche incluyendo el área de los ojos y sí, además, vas a exponerte al
sol, no olvides un protector diseñado para la cara.
Aplica una base ligera. Al tener el tiempo preciso, es una mala
idea recurrir a bases pesadas ya que los errores podrían salir a flote.
Busca bases de cobertura light o media y extiéndela hasta el
cuello y escote; matifica con polvos sueltos o compactos.
Utiliza corrector de maquillaje si tus ojeras o marquitas saltan a la vista. Un corrector de esponja como o en pasta te ahorraran valiosos minutos. Concentrate en la esquina interior de los ojos para iluminarlos.
¡Riza tus pestañas!, no hay modo más fácil de lucir despierta.
Combínalo con sombras neutras y mascara negra para un look discreto y
natural. Evita aplicar rímel en las pestañas inferiores pues requiere de
práctica y tiempo.
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